En las fosas localizadas podrían yacer aproximadamente una quincena de personas en cada una de ellas

EUROPA PRESS La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Granada tiene previsto acometer próximamente dos exhumaciones en Gualchos y Pinos del Valle, donde han sido requeridos para localizar sendas fosas en las que yacerían aproximadamente una quincena de personas en cada una de ellas.

En Gualchos, un anejo de Motril, las víctimas están relacionadas con lo ocurrido el 31 de julio de 1947, cuando la Guardia Civil cercó un cortijo en el que supuestamente se ocultaba un bandolero, según la documentación histórica consultada por la asociación.

En la refriega murieron tres de los guerrilleros que se ocultaban en la zona -la familia de uno de ellos es la que ha solicitado la exhumación- y un teniente de la Guardia Civil, ha explicado a Efe la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Granada.

Pero la asociación averiguó que un día después, el 1 de agosto de 1947, hubo una redada entre once vecinos del Puntalón, entre ellos matrimonios e hijos que fueron supuestamente fusilados entre el cruce de Lújar y Gualchos, prácticamente la misma zona en la que murieron los tres guerrilleros, por lo que creen que la fosa en cuestión albergaría los restos de un total de 14 personas.

La exhumación prevista en Pinos del Valle está también relacionada con una refriega con bandoleros que dio como resultado la muerte de unas doce o trece personas cuyos restos estarían repartidos en dos fosas sobre las que la asociación se ha documentado.

Tanto en el caso de Gualchos como en el de Pinos del Valle, la asociación se encuentra en la fase de recopilación de datos preliminares para llevar a cabo las exhumaciones una vez dispongan de la logística necesaria.

La asociación, que pretende llevarlas a cabo con la subvención de unos 45.000 euros que les concedió en su día la administración autonómica, tienen de plazo hasta final de año para terminar ambas actuaciones.

Otro de los proyectos previstos, aunque en fase más incipiente que los anteriores, es una exhumación en Cúllar Vega, donde en septiembre de 1936 fueron fusilados unas siete u ocho vecinos de Alhendín.